la vuelta a maeon

Regresar a tailandia ha ssido como regresar a casa, esta lleno de comodidades: hay tiendas, café, leche de soja y, sobretodo, agua por todas partes. Todo es mucho más barato. También acampar es muy comodo, principalmente si usas el ONE STOP SERVICE que en cada estacion de policia de pueblos ofrece: camping gratis, ducha fria y si tienes suerte internet y cafe por la mañana.Todo quedó comprobado en chaloem prakriat, el primer pueblo de la frontera de tailandia.

Ya con la nueva ruta preparada salimos rumbo a nan por una carretera pequeña, aa pesar de las advertencias de la gente que nos indica por señas que el camino es todo montañas. Contentos con esto salimo rumbo bo kluea que está a 75km. Unas galletas chocolate me han ayudado hasubir los primeros 35km. en 4 horas pedaleando.Hemoss subido y bajado valles hasta la saciedad, un coche todo terreno, que es lo que se ve por aquí, ha parado y me ha dado dos pepsis y ánimos para llegar a bo kluea, aunque la cara qur ponen cuando les digo donde voy me asusta toda la gente qur me encuentro da animos, pitan sonrien y levantan el dedo.

Hemos llegado a bo kluea por la noche, y es que 6 km subiendo y bajando valles por carreteras llenas de bachesby sin luz se hacen mas largos de lo esperado. La carretrra ha sido espectacular: valles de palmeras, selva, pinos, vacas y carabaos (bufalos), todo siguiendo el rio nan corriendo en direccion opuesta.
Salir de bo kluea fue mucho mas facil que empezar, 50 km. De valles se han pasado rapidos, y antes de lo esperado estamos en santisuk tomando una ensalada de papaya, coco y un cafe.

Desde ahi a nan han sido 30km. Nan es una ciudad pequeña en la que apenas llega el turismo, lo que es muy bueno para nosotros porque se nota que la poblacion todavia no esta quemada de tanto farang y todo el mundo te trata super bien. Aunque la idea era quedar solo un dia, conocer a Jin, una mujer jovial de 60 años que tiene un restaurante vegetariano, hizo que nos quedaramos unos dias mas. 2 dias mas invitados en su casa y comiendo sin parar, al final irse de nan fue como cuando eres adolescente y abandonas la casa de tus padres, menos comodo todo pero mas libre.

Los valles de nan, y las montañas.

El restaurante de jin. Que bien comimos!!!!

De nnuevo en la carretEra camino a phrae por una autovia, el camino fue tan aburrido que aunque llegamos a las 12h. A phrae decidimos quedarnos para ver la ciudad. Dos razoneS principales: un litro de café bourang con hielo y un hotel chino increíblemente baratos. Si a Nan llegaba poco turismo a phrae menos.

Los elefantes en phrae vienen a ser lo que las cabras de los gitanos en España,sus amos los usan como atracción para sacar algo de dineros.

Hotel chino, una lotería donde lo único seguro es que es barato.

El siguiente día tomamos la carretera hacia lampang, pero por el camino perdí a mikele, asi que hice todo el camino en solitario parando en un parque nacional con unas formaciones de rocas impresionantes. Ya entrandoentrando a lampang despues de 90km. Me he encontrado con mikele y para celebrar el encuentro hemos vuelto a coger un hotel chino.

Esta vez tuvimos mas lujo!

Lampang resultó ser una ciudad mas grande de lo que pensaba, aparte de restaurantes vegetarianos y bares para turistas, el extrarradio es gigante. A la salia hemos tomado un desvío para evitar la carretera grande que va china mai. 40 km hasta mueng pan con algo de montaña pero sin sudar demasiado. Desde ahí tomamos una carreterita rural que nos llevara de vuelta a maeon entre valles y montañas.

El camino es tremendo, unos paisajes increíbles entre la selva, el río entra a tramos en la carretera y como colofón una cascada de 7 pisos. Eso si, la pendiente dura como ya viene siendo normal incluso mas: 2 hora para hacer 10 km, de subida.
Ya de bajada estamos regresando a maeon, despues de 3 semanas y con mas de 1000km recorridos, algunos kilos menos y bastante cansados.

En los últimos km. De la carretera encontré un peculiar templo en medio del río con unos murales así de sugerentes.